Puntos de control durante la producción de nuestra cerveza

A la hora de elaborar nuestra cerveza, nuestro departamento de calidad lleva a cabo distintos controles durante la producción, de los cuales hablaremos en las siguientes líneas.

Nuestra fábrica dispone de dos tanques acumuladores de agua, de tal forma que, se acumula el día previo a la producción la cantidad necesaria de agua. Para el caso del tanque de agua fría, hay un sistema de enfriado mediante glicol, lo que nos permite tener el agua necesaria para el enfriado del mosto a una temperatura adecuada.

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Y en el caso del tanque de agua caliente, el día previo se procede a hervir durante unos 15 minutos para llevar una previa esterilización, así como para eliminar en gran medida el cloro que contiene el agua (ya que utilizamos el agua proveniente de la red).

Controlamos el cloro del agua proveniente de la red pública, el pH del agua, así como su conductividad para la maceración.

Durante el proceso de producción además de parámetros básicos como la densidad del mosto inicial y final durante el filtrado y de la densidad previa y posterior a la cocción realizamos controles del pH tanto al inicio de la maceración como después de la cocción, ajustándolo si es necesario añadiendo ácido láctico.

En el transcurso de la fermentación se hace un estudio poblacional de la levadura para observar que evoluciona adecuadamente. También comprobamos diariamente la densidad para estimar cuándo ha finalizado la fermentación. Además, realizamos un estudio microbiológico de todas nuestras cervezas, del cual hablaremos más ampliamente en otro artículo.

Si se trata de cervezas refermentadas, cuando se ha estimado que la primera fermentación ha finalizado, las ponemos guarda y realizamos la prueba de la atenuación límite con lo que sabremos si queda azúcar fermentable residual. Dicho dato lo tendremos en cuenta en el azucarado, para evitar que se produzca una sobrecarbonatación.

Durante el proceso de embotellado, recogemos botellas al azar para realizar también un estudio microbiológico.

Finalmente, a la cerveza se le realiza control de IBUs, alcohol, gasificación, aroma, olor, color y sabor para comprobar que es un producto 100% de calidad.
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