Al igual que existen muchas variedades, hay muchas formas de pedir una cerveza, y eso depende en gran medida de la comunidad autónoma en la que nos encontremos.
En España se mezclan diferentes costumbres, creencias y tradiciones; lo que da como resultado una gran riqueza y diversidad cultural. Por eso, según cada región, la cerveza se pide de una forma u otra.
¿Por qué se pide una cerveza de manera distinta en cada lugar?
La cerveza no entiende de distinciones. Quien sí encuentra diferencia son los cerveceros, porque no es lo mismo pedir una caña, que un botellín, zurito, doble, pinta, quinto, corto o tercio, por ejemplo. Estos formatos se diferencian en la cantidad que contienen y en que son terminologías que provienen de diferentes ciudades.
Seguramente que, si estás de visita por Asturias, se extrañarán si pides un penalti, porque precisamente esa palabra se utiliza para pedir cerveza en Aragón.
Si te encuentras en el País Vasco la forma de pedir lo que se conoce como corto en otras regiones del norte (por ejemplo, en Galicia), que es el trago más pequeño con una medida que oscila entre los 100 y los 140 ml, es pedir un zurito.
Anteriormente ya las hemos mencionado y hemos dado algunas pistas, pero ¿sabes diferenciar entre caña, doble y tercio? Es muy sencillo, toma nota:
La caña es el formato por excelencia, seguramente el modo más extendido de pedir cerveza de grifo en cualquiera de los más de 264.000 establecimientos de hostelería que hay en España. Los 200 ml de la caña son la medida estándar especialmente en el centro de la Península.
El doble, como su propio nombre indica, contiene el doble de cantidad de una caña, es decir, 400ml. Es la misma medida del cañón vasco.
Por último, tenemos el tercio, que es la tercera parte de un litro, también llamada media en Asturias y Cantabria, o mediana en Cataluña. Y hablando de botellas, no podemos olvidarnos del botellín o quinto, de 250 ml.
En definitiva, formas de pedir cerveza hay muchas, pero la mejor, sobre todo si estás en Madrid o Toledo, es pedir una LA SAGRA. Lo único que debes tener claro es qué variedad prefieres: una sin alcohol, una radler, una rubia… Todas ellas de gran calidad y con los mejores ingredientes.
Si no, siempre puedes hacer tu pedido online sin tener que preocuparte de cómo referirte a ellas, solo te hace falta disfrutarlas.