“Uno de los momentos clave de nuestra historia fue cuando logramos abrir las puertas de las grandes superficies”
Diego Mérida forma parte de la primera generación de trabajadores de Cerveza LA SAGRA. Fue eL cuarto en incorporarse a un proyecto que en menos de una década ha crecido hasta convertirse en cabeza de cartel del mercado de la cerveza artesana en España. Licenciado en Gestión y Administración de Empresas, amante de correr al despuntar el sol, de los largos paseos con su perro y la gastronomía, Diego explica cómo es su labor en Cerveza LA SAGRA.
¿En qué consiste tu trabajo?
Soy el delegado comercial en Castilla-La Mancha. En Madrid también llevo las cuentas de los clientes más antiguos, aquellas que apostaron por nosotros cuando empezamos. Ya prácticamente no hago puerta fría. Mi trabajo está más en la labor de asesoría a la red de distribuidores con los que contamos y sus comerciales; hacer seguimiento a los clientes de mis zonas. Trabajo con cinco distribuidoras: en Cuenca, Toledo, Talavera..y en Madrid, con Pifema que están con nosotros desde el principio. También llevo el área de Eventos, trabajando mano a mano; llevando la cuenta de nuestra persona encargada de las Ferias y también llevo las catas y cenas maridaje que hacemos.
¿Cómo fue tu entrada en el proyecto de LA SAGRA?
Fui la cuarta persona que entró en la empresa. Fue en el año 2011. Llevo ya en este proyecto 7 años. Mi función era hacer un poco de todo. Entré para llevar la logística, pero eran tiempos en los que había que colaborar en todas las áreas porque éramos muy pocos y estábamos empezando. Me dediqué mucho al departamento comercial haciendo puerta fría pero también hacía cosas en administración; preparar pedidos, logística, embotellar cuando hacía falta…
¿Tenías alguna experiencia previa en el mundo de la cerveza artesana?
No. Tengo estudios de administración y gestión de empresas y antes había trabajado en una importadora de aceitunas y encurtidos y más tarde en una distribuidora de catering para Ministerios, colegios, residencias. Siempre he estado vinculado al mundo de la restauración, pero al de la cerveza. Me llamó Carlos, me explicó el proyecto que quería desarrollar y no lo dudé ni un momento.
Desde la perspectiva que da el haber acompañado este proyecto desde casi el principio, ¿Cuáles han sido los momentos clave de la historia de la empresa que han impulsado su desarrollo?
Para mí, hay dos claves claramente. Una fue cuando empezamos a trabajar con las grandes superficies. Estuvimos mucho tiempo llamando a las puertas de los grandes centros hasta que apostaron por nosotros. Fue muy importante en cuanto a crecimiento e imagen. El otro momento clave fue, sin duda alguna, la entrada de Molson Coors.
Desde tu perspectiva personal, ¿Cómo has visto el crecimiento de la empresa en todos estos años?
Lo estoy empezando a asimilar. Al principio, reconozco, me daba mucho vértigo. Hemos crecido brutalmente. Todos los trimestres, sumábamos ventas. Al final, lo importante es que la empresa se ha ido profesionalizando y especializando, formando un gran equipo de profesionales.
¿Qué deparará el futuro a Cerveza LA SAGRA?
Lo veo muy prometedor. Seguimos creciendo, ahora más poco a poco porque ya es más complicado pero cada vez tenemos más puntos de venta, más visibilidad. En este sector tan duro, surgieron muchos proyectos y ya van quedando los más profesionales. Si no apuestas por esa línea, te vas quedando abajo. LA SAGRA tiene un gran futuro y más aún con el mercado exterior, donde ya estamos entrando con mucha fuerza.